Divagación

Cristina Maya


Voy por tu piel desnuda
alcanzando tus manos que diluyen las horas,
acercando mis ojos a tus sueños,
dibujando tu frente, tu mirada,
súbitamente recobrándote.
Comienzo a oír tu voz ahora,
a algún país lejano perteneces,
dueño de alguna embarcación perdida,
así te siento....
Ahondo mi corazón en tu latido,
distante estás del mar soñado
Y a mi orilla te acoges dulcemente.

  • Poesía colombiana