Perdiéndome en tu cuerpo

Orietta Lozano


Mi boca de poca risa
parte alegre hacia tu boca
y como siempre voy hacia tu cuerpo
estoy sin voz
a la hora de los besos
Me detengo un minuto
en el silencio
para componer un canto a tus caricias
y voy perdiéndome en tu cuerpo
La noche me envuelve lentamente
y las llaves de la casa
me recuerdan el regreso.

  1. Del libro Fuego secreto (Ediciones Puesto de combate, 1980)